viernes, 13 de noviembre de 2020

Un recuerdo IV

 



Estuvimos liados casi un curso, es el único curso que siento no haber repetido.

¡Qué frase tan bonica, Paco!

La expresión de la cara le cambiaba constantemente, como en analepsis, según recordaba situaciones, mudaba de la melancólica a la decepción, de la alegría a la gratitud, del desaliento a la serenidad.

Cuando estuve con ella disfruté de la vida, y me sentí fuerte, importante y listo. Ese fue mi gran error, me sentía más inteligente que ella y, en cierta medida superior. En tan solo unos meses se me olvidó que era un pringao en cuestiones amorosas. ¿Eso cómo se llama?,  tú que escribes.

Diría que eso es soberbia, pero en tu caso con la atenuante de acomplejada gilipollez de la juventud.

Y la perdí, realmente la eché de mi lado, porque no leía los libros sesudos que a mí me gustaban, ni se tomaba la política demasiado en serio. Pensé que no podría ser feliz así a la larga. Se me olvidó que en eso lo que rige es el corazón.

Cuando dices eso, te refieres al amor. Parece que te cuesta decirlo, como si fuera sentimiento burgués. Oye, ¿y cuándo te diste cuenta de lo que sentías no pensaste en volver, en decírselo?

Claro que lo pensé, pero enseguida la vi con otro, creo que no sabía estar sola. Ya no pintaba nada.

¿Ella te quiso? Quiero decir si tú lo sentías.

Sí, y también creo que nunca me ha querido nadie así.

Me dio miedo volver, que me dijera que no, creo que lo que me acojonaba era  hacer el ridículo. Y ahora me arrepiento. No sé qué hubiera pasado. ML ahora lleva casi tres meses viuda, posiblemente siga sin saber estar sola,  Por eso ahora...

Me miró con la interrogación de la frase en el aire. 

En efecto, como pensé al principio, estaba preguntándome por los albañiles. 



N.A. TODO ES INVENTANDO, CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD DE SITUACIONES O PERSONAJES ES DEBIDO A FALTA DE IMAGINACIÓN.




3 comentarios:

  1. Me encanta. Cada vez escribes mejor.

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  2. He disfrutado mucho con este relato. Temía que hubiera embrollado mucho los diálogos. Gracias, hermanica.

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  3. Siegque, libros sesudos ni en la biblioteca, porque queda constancia de que por lo menos se intentó.
    Lo tuyo no es leer, sino escribir.

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