viernes, 13 de noviembre de 2020

Un recuerdo II





A mí también me gustó ML, joder, ¿pero a quién no le gustaba? Tal vez era demasiado delgada, tal vez demasiadas pecas sobre la piel lavada, tal vez demasiado delicada... la verdad es que era una preciosidad tipo Kataharine Houghton Hepburn, pero más de aquí.

Luego en la vida ha sufrido muchas penas, me he enterado de que, hace unos días, su segundo marido, el policía,  se ha suicidado. Comentan que porque se iban a divorciar y él no lo soportaba, que porque ella se salía por ahí con otros y ... en fin, se pregonan tantas barbaridades. Lo cierto y verdad es que el muchacho se pegó un tiro en el pecho, en el corazón, una muerte con la que claramente le quería dejar un mensaje indeleble y  cabrón.  Es difícil juzgar el sufrimiento.  ¡Todos vivimos como podemos!

En ese momento Paco se echó a reír. Es la risa que surge en la tristeza de los duelos. Me dijo entre dientes que eso aún no pero que llegaría. 

Ya, él leyó ¡Todos vivimos como Podemos!  Os conté que Paco es muy político. Reímos.

Lo que tú no sabes, me dijo, es que estuve con ella un tiempo en Murcia. Allí coincidimos unos años, ella se fue a estudiar derecho, aunque lo que se dice estudiar no lo hacía mucho, eso sí, con el tiempo lo terminó en la UNED. Ahora creo que ejercía de abogada laboralista en la UGT y creo que lleva casos sobre despidos objetivos y ...

Le corté en seco, ¡coño Paco!  no me cuentes el estatuto de los trabajadores y dime qué pasó en Murcia. 






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